Jornada de "puertas semiabiertas" en Villaescusa de Palositos
Amigas y amigos de Villaescusa de Palositos: El pasado sábado 25 de abril, por cuarto año consecutivo, hemos realizado la Marcha de las Flores a Villaescusa de Palositos. Los motivos que dieron lugar a la primera marcha en 2006 siguen vigentes ante la inacción de los responsables públicos, por eso, las asociaciones convocantes debemos dar las gracias a las demás asociaciones y organizaciones que nos han acompañado y transmitido su apoyo, también a los ciudadanos y ciudadanas que llegaron libremente hasta Villaescusa, simpatizando con nuestra justa causa, y a los que quisieron estar pero que por diferentes razones no han podido hacerlo físicamente.
Antes de empezar la crónica de este año queremos agradecer a los medios de comunicación la atención que nos han prestado. En especial a los medios escritos, ABC en su edición de Castilla-La Mancha; El Día en su edición de Guadalajara; El Decano en su edición digital y a TVE por hacernos un hueco en su espacio España Directo de difusión nacional que se centró más en la imagen que en la palabra. De cualquier modo las crónicas que han realizado dichos medios son bastante aproximadas a la realidad aunque quizá se haya deslizado alguna inexactitud, perfectamente disculpable, por la limitación de espacio en la prensa escrita y de tiempo en televisión.
También, ante la supuesta falta de información de determinadas personas, sobre la motivación de estas marchas, es preciso dejar claros algunos puntos para que les sirvan de referencia cuando opinen sobre este lamentable asunto no generado por las asociaciones convocantes.
1º) Estas Marchas no se realizan en contra de nadie.
Cualquiera de estos puntos son fácilmente comprensibles y solamente tienen una lectura si ésta se realiza desde la buena fe. Quien quiera ver otros objetivos distintos a los expuestos, simplemente es que tiene una capacidad de entender muy limitada o, peor aún, si teniendo capacidad de entender se deja arrastrar por intereses muy concretos abdicando de su supuesta capacidad.
Vayamos con el relato de la IV Marcha de las Flores en tono distendido.
Al ya clásico Punto de Encuentro fuimos llegando poco a poco, allí intercambiamos los primeros besos, abrazos y saludos del día. Algunos de los presentes llevan décadas sin verse y, aunque sólo fuese por ese motivo, ya merece la pena realizar este pacífico y emotivo acto después de recorrer cientos de kilómetros y grandes madrugones. Hay quien se ha levantado a las 5 de la mañana para estar aquí y tiene por delante una dura jornada.
El camino público de Peralveche a Villaescusa estaba bastante seco, a pesar de las recientes nevadas y lluvias, por lo que no ofrecía las dificultades de años anteriores, además, el día amaneció primaveral pese a los malos pronósticos meteorológicos. Algunas nubes, curiosas ellas, decidieron el sábado acompañarnos en nuestro trayecto pero sin aguarnos el día, ya hay otros que se encargan y trabajan especialmente para ello.
Los peregrinos de la Ruta de la Lana del Camino de Santiago, al igual que hicieron el año pasado, realizaron la etapa a "contraflecha" iniciando su peregrinar en Viana de Mondéjar para reunirnos en la Plaza pública de El Coso.
Por fin empezamos a caminar a nuestro aire, unos más deprisa, otros más despacio, otros en animada charla con el ocasional compañero hasta nuestra primera parada forzosa que, como no podía ser de otra manera, estaba motivada por la ignominiosa puerta al campo cortando el camino público.
Tampoco este año sería la única puerta. Al llegar a la altura de esta primera ilegal puerta nos estaban esperando los reporteros de Televisión Española para, según nos dijeron, realizar un reportaje para el programa España Directo que se emitió el domingo 26 de abril en horario de máxima audiencia.
Superado este primer contratiempo, apartando la puerta con suavidad, nadie deseaba probar el alambre de espino, continuamos nuestro pacífico recorrido eso sí, bien escoltados y protegidos, hasta alcanzar lo que nosotros siempre hemos llamado “El prao la fuente”, no en vano allí estuvo la primera fuente pública de Villaescusa. También estaban allí los chopos, viejos conocidos nuestros, que en los años 50 del siglo pasado plantaron los vecinos de Villaescusa a la orilla del arroyo como lugar comunal del pueblo.
Pocos metros más adelante, y cuando ya íbamos a tomar la entrada a la plaza pública de El Coso, nos encontramos con que el mallazo de obra de los años anteriores, por el paso del tiempo y las siempre beneficiosas nieves y lluvias, se habían transformado en una robusta puerta que, caprichosamente, había elegido el camino público real para desarrollarse, seguramente por descuido y sin mala voluntad. No hubo más remedio que convencerla para que se abriese lo suficiente para dejarnos pasar aunque no lo hizo de buen agrado, resistiéndose al principio a nuestros ruegos. Finalmente la fuerza de la razón convenció a la puerta, y al conjuro de ¡Sésamo, ábrete!, de aquel famoso cuento que todos hemos leído, sí el de "Alí Babá y los…", accedió a separar levemente su doble hoja para dejarnos pasar, eso sí, de uno en uno y despacito que alguien podía lastimarse de nuevo con los alambres de espino.
Cuando llegamos a la Plaza pública de El Coso, los peregrinos de la Ruta de la Lana del Camino de Santiago, ya estaban allí. Ellos tienen las piernas y el espíritu mejor que muchos de nosotros y nos tomaron la delantera, incluso algunos de ellos, preocupados por nuestra tardanza, salieron a nuestro encuentro hasta la primera puerta por si precisaban socorrernos. Son, ¿cómo diríamos con todo cariño?, una especie de nuestros ángeles custodios en el Camino. Ellos también tuvieron que salvar una remozada puerta en la Ruta de la Lana, poco antes de llegar a Villaescusa desde Viana de Mondéjar. Parece que el negocio de puertas al campo, aun en tiempos de crisis, marcha bien por estos pagos. Aquí podemos verlos cuando se toparon con "su" remozada puerta, más señorial y de mayor prestancia, y cuando llegaron a buscarnos a "nuestra" puerta, algo más rústica, cual puerta de servicio.
Este año la vía pecuaria Cordel de Carrasalmerón, que nace en la Plaza pública de El Coso y pasa por delante del Cementerio Municipal, tenía sus dos puertas abiertas de par en par, abiertas que no quitadas. ¿Sería en nuestro honor? Lo dudamos. ¿Sería por la presencia de la Guardia Civil? Podría ser. ¿Sería para evitar que a alguien le tachen de desobediente? Lo veremos. ¿Estarán igual el resto del año? Deberían estarlo. Eso sí, el tramo desde la plaza hasta el cementerio, parecía una era repleta de parva, con excrementos varios, como si estuviéramos en época de trillar. Suponemos que el cordel estaría debajo de ese manto pajizo. A algunos nos recordaban los caminos de las eras cuando siendo unos críos acarreábamos la paja en las angueras con las mulas desde las eras hasta los pajares.
Por fin llegamos a nuestra difícil meta y objetivo número uno: Poder realizar una sencilla ofrenda floral a nuestros ascendientes, que para siempre reposan en el Cementerio Municipal de Villaescusa de Palositos. La centenaria y artística puerta de madera de acceso, la única puerta en la Villaescusa actual que tiene, por historia y cometido, plena vigencia y razón de ser y estar, había sufrido desde abril de 2008 un acto de vandalismo al más ruin estilo. ¿Quién tendrá tan bajos y primitivos instintos para cometer esos actos?
Acto seguido llevamos a cabo la ofrenda floral. Es un sencillo y emotivo acto en homenaje a todos los que en el cementerio yacen, personas que amaron su tierra y que trabajaron duramente para sacar adelante a sus familias con los precarios medios que tenían. Gracias al esfuerzo de todos ellos estamos hoy aquí nosotros y los amigos que nos acompañan venidos desde muy diversos lugares. Hecha la ofrenda se rezó una oración que fue seguida con gran respeto por todos los asistentes.
Por cierto, alguien ha realizado unas declaraciones en un medio de comunicación, que pudo oír y ver toda España, diciendo que ya no existe ningún cementerio porque no hay lápidas ni nichos (sic). En Villaescusa, como en otros muchos cementerios de pueblos pequeños y aldeas, nunca hubo ni lápidas ni nichos, no sabíamos que fuese condición "sine qua non" para que exista un cementerio. En cualquier caso ¿dónde hemos estado nosotros? ¿Qué se alberga entre esas paredes centenarias que tanto parecen molestar? Que sepamos no se ha reproducido ni individual ni colectivamente el milagro de la resurrección de Lázaro, ni ha llegado el Juicio Final, por ese motivo nuestros antepasados siguen descansando en el Cementerio Municipal de Villaescusa de Palositos que
Terminado el acto volvimos por la Plaza de El Coso para dirigirnos hasta la iglesia románica. En el trayecto pudimos observar los restos de lo que fue la Casa Consistorial, la casa de todos. En apenas tres años su ruina es total. Sus ennegrecidas vigas dan fe de que allí ha podido estar Vulcano, dios del fuego, participando con suma violencia en algún aquelarre nocturno.
Llegamos a otro de nuestros objetivos, la iglesia románica del siglo XIII que "Gilem" construyó para los primitivos moradores y sus generaciones descendientes. Su estado es ya alarmante. La Junta de Castilla-La Mancha ha apostado por su conservación y mantenimiento en el mismo lugar en el que se erigió. Para ello la ha incluido, gracias a las reivindicaciones de todos nosotros, en el Plan de Recuperación del Románico de Guadalajara, que actuará sobre 27 templos, y cuyo Protocolo de actuación fue firmado en noviembre de 2008 entre el Presidente de Castilla-La Mancha, D. José Mª Barreda y Monseñor Sánchez, titular del Obispado de Sigüenza, su legítimo propietario.
Según las informaciones recibidas el orden de intervención lo determinará el estado de conservación de cada templo. Si esa es la principal razón la iglesia de Villaescusa debería ser la primera en recibir los primeros auxilios y las bendiciones necesarias para su rehabilitación y que podamos legar a generaciones futuras un patrimonio histórico y artístico en el mismo estado de conservación que lo heredamos de nuestros antepasados. Creemos que unas ilegales puertas en caminos públicos, inadmisiblemente consentidas, no pueden dar al traste ni coartar la decisión del Gobierno de Castilla-La Mancha, sería difícil de explicar a la opinión pública.
Todos recordamos la amplia campa que rodeaba la iglesia. Incompresiblemente, en menos de cuatro años, ha sido fagocitada porque la iglesia no se ha movido de su sitio y aquí está la muestra. ¿Nadie tiene nada que decir o hacer sobre esto?
Prácticamente ya habíamos cumplido el motivo de nuestra visita, pero antes algunos de nosotros quisimos llegar hasta la única fuente municipal que hasta ahora ha sobrevivido. La fuente pública de El Gamellón y su anejo lavadero en el que nuestras madres y abuelas se dejaban las uñas lavando ya hiciese frío o calor. Alguien escribió hace un par de años "Agua no potable". Nosotros bebemos todos los años y aquí estamos, quizá el significado de esa advertencia sea ahuyentar a quien ose llegar hasta aquí. El estado de deterioro de esta fuente también es notable ante el afán de algunos de cargarse la naturaleza pero ésta, generosa, sigue proporcionando unos grandes caños de agua en lo que un poco más adelante será el arroyo Ompólveda. ¿Por cuánto tiempo?
Iniciamos el camino de regreso de nuevo por caminos y plazas públicos. Volvimos hacia el juego pelota por el camino público que tantas veces transitamos, nosotros y los patos de Adela que muchos recordaréis. Eran patos libres que recorrían el camino sin alambradas.
El juego pelota municipal, algo "transformado", tiene todo el aspecto de un desguace público y gratuito en mitad de La Alcarria.
Atrás dejamos la Plaza de El Coso y enfilamos por el camino real de Villaescusa a Peralveche. Superamos la robusta nueva puerta y nadie pronunció el conjuro de ¡Sésamo, ciérrate!, sí el del cuento de “Alí Babá y los…” para que se cerrara. Dejamos atrás la chopera comunal y, tan pacíficamente como llegamos, volvemos al Punto de Encuentro.
Es el momento de reponer fuerzas, hacía más de cinco horas que habíamos emprendido la marcha y las necesidades de alimentar el cuerpo hormigueaba en nuestros estómagos. También es el momento de relajarse, comentar nuestras experiencias y sacar las conclusiones de la Jornada de “puertas semiabiertas” en Villaescusa vivida hoy, todo ello picoteando aquí y allá ya que los alimentos son generosos y apetitosos.
Las ovejas también salieron a despedirnos, por algo estamos en la Ruta de la Lana. Y como personas civilizadas que somos y respetuosas con el medio natural, recogimos y limpiamos el entorno para dejarlo igual o más limpio de lo que nos lo encontramos. Llega el momento de la despedida para partir hacia nuestros lugares de residencia ya que algunos tienen cientos de kilómetros por delante. Antes de los besos de rigor, posamos para el álbum familiar dándonos cita para la V Marcha de las Flores el 24 de abril de 2010.
En Villa Excusa de los Palos Hitos, a veinticinco de abril del año dos mil nueve.
Cuando D. Antonio Machado escribió estos magistrales versos,
Hace algún tiempo en ese lugar
Cuando el jilguero no puede cantar
hoy, D. Antonio, nos permitiría, sin duda, hacer algún pequeño cambio en el grito del poeta para entonar,
" Caminante SÍ hay camino,
*******************************************
|